Mujeres víctimas de violencia sexual

Desde el 2014, cada 25 de mayo se conmemora el Día nacional por la dignidad de las mujeres víctimas de violencia sexual en el marco del conflicto armado, con el propósito de reconocer y recordar la valentía, el trabajo y la resistencia de miles de mujeres afectadas por este flagelo. Además, busca reivindicar su dignidad y rechazar un delito que ha sido históricamente invisibilizado y silenciado.

Según la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición (CEV, 2021) y el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH, 2018), la violencia contra las mujeres en este contexto no es un fenómeno aislado, sino que está estrechamente ligada a las dinámicas y estrategias del conflicto armado. Se trata de una táctica de guerra diseñada para controlar y dominar todo lo que se encuentra más allá del campo de batalla. En este sentido, la violencia sexual emerge como un mecanismo utilizado por los actores armados para someter disciplinar y castigar los cuerpos.

Este patrón de violencia afecta de manera desproporcionada a niñas, adolescentes y mujeres de todas las edades, evidenciando afectaciones a causa del género, teniendo un impacto diferenciado en las mujeres de las comunidades afrodescendientes e indígenas.

En esta conmemoración, la Unidad para las Víctimas honra la memoria y la valentía de las mujeres que, en medio del horror, han luchado individual y colectivamente por la reparación y dignificación de las afectadas por este flagelo, así como por la reconstrucción de sus proyectos de vida. Además, resalta los datos que reflejan el impacto de los delitos contra la libertad y la integridad sexual en las mujeres en el marco del conflicto armado.  



Las víctimas de violencia sexual han vivido en carne propia las vejaciones que se ejercen sobre los cuerpos considerados disponibles, reducibles a objetos; esta violencia que permea todos los espacios sociales.
CNMH,2021.  

¿Qué dicen los datos?

Mujeres víctimas de violencia sexual
Mujeres víctimas de violencia sexual

¿Hacia dónde dirigir la atención?

Mujeres víctimas de violencia sexual

Más allá de las cifras 

El impacto de la violencia sexual en mujeres indígenas y afrodescendientes durante el conflicto armado. 

Mujeres víctimas de violencia sexual

Pilares de la resiliencia

La protección, el cuidado y la lucha por la visibilización

A pesar de los desafíos inherentes, las mujeres han perseverado en su lucha por proteger a sus familias, comunidades y territorios, al mismo tiempo que exigen el restablecimiento de sus derechos y el reconocimiento de lo que ha sido invisibilizado.

Según el informe "La verdad de las Mujeres" de la Ruta Pacífica de las Mujeres, las sobrevivientes han focalizado sus esfuerzos en reconstruir las condiciones materiales para una vida digna. Simultáneamente, han trabajado incansablemente para restablecer los lazos comunitarios y colectivos, buscando intervenir y apoyar a otras mujeres que enfrentan situaciones similares.

Las juntanzas, los colectivos y las plataformas han servido como espacios de creación de redes de apoyo, donde el cuidado, la reparación y la solidaridad son los pilares fundamentales. Estas estrategias han contribuido de manera significativa a la sanación, tanto a nivel colectivo como personal. Además, el impacto directo de estos procesos y resistencia de muchas mujeres se ha reflejado en los cambios sociales y políticos actuales, que finalmente han logrado el reconocimiento y la reparación de los impactos sufridos como consecuencia de la violencia sexual durante el conflicto armado.

En este día conmemorativo, resaltamos algunos de los numerosos esfuerzos individuales y colectivos, dedicados al cuidado y protección de miles de mujeres sobrevivientes de esta atroz violencia. Además, es fundamental reconocer y exaltar las valiosas contribuciones que estas mujeres han realizado en la construcción de la paz y en el proceso de reparación integral.


Entre las mujeres que dieron su testimonio,
más de una de cada tres mujeres se organizaron para defender sus derechos o hacen parte de alguna organización de mujeres

La Verdad de las Mujeres, Ruta Pacífica 


Historias de persistencia y dignidad

Mujeres víctimas de violencia sexual

Jineth Bedoya, periodista, escritora y activista contra la violencia basada en género. 

En el año 2000, la cárcel Modelo se convirtió en un escenario de guerra entre los paramilitares y la guerrilla, donde más de 100 personas fueron asesinadas y desaparecidas. Durante ese tiempo, Jineth Bedoya cubrió el desarrollo de estos eventos y, respaldada por su neutralidad como periodista, solicitó una entrevista a los paramilitares. Sin embargo, al llegar a la cárcel, fue abordada por un grupo de personas que la secuestraron durante 16 horas, tiempo durante el cual sufrió tortura y abuso sexual.

La justicia colombiana revictimizó a Jineth, lo que llevó al Estado a comparecer ante la Corte Internacional de Derechos Humanos, instancia que responsabilizó al país de las vulneraciones a sus derechos.

Desde entonces, su trabajo se ha centrado en visibilizar los impactos de las violencias basadas en género y en amplificar las voces de quienes las padecen. Su lema "No es hora de callar" busca promover la denuncia de la violencia sexual e instar a las sobrevivientes a alzar su voz contra la violencia de género.

En 2014, el Estado Colombiano decretó el día nacional por la dignidad de las mujeres víctimas de violencia sexual en el marco del conflicto armado, como medida de reparación colectiva a raíz del caso de Jineth, estableciendo el 25 de mayo como la fecha conmemorativa.

Síguela en X

Mujeres víctimas de violencia sexual

La Coordinación de Mujeres Afrocolombianas Desplazadas en Resistencia “La Comadre”.

En el 2001, en medio de una de las etapas más violentas de la guerra en Colombia, con el auge y la expansión de los grupos paramilitares y una marcada presencia en todo el país de la antigua guerrilla de las Farc - EP, surgió la semilla de La Comadre.

Estas mujeres llegaron a Bogotá desplazadas. Muchas habían sufrido violencia sexual, otras habían perdido a sus esposos, hijos, hermanos o padres debido a asesinatos o reclutamiento forzado.

La Comadre es un proceso organizativo autónomo de mujeres afrocolombianas que forma parte de la Asociación Nacional de Afrocolombianos Desplazados (AFRODES). Con más de 15 años de trayectoria, se ha consolidado como alternativa para acompañar a las mujeres en la superación de los graves impactos del conflicto armado.

Además, han implementado estrategias de incidencia que van desde la reconstrucción de la memoria histórica hasta la promoción de enfoques diferenciales en las políticas de prevención, atención y acceso a la justicia en casos de violencia sexual y violencia generalizada contra mujeres afrocolombianas. La Comadre es un colectivo pionero en la lucha para que las mujeres negras y afrodescendientes sean el primer sujeto colectivo en Colombia en ser reparado. 

Síguela en X

Mujeres víctimas de violencia sexual

Mujeres indígenas del norte del Cauca

Las mujeres indígenas han desempeñado un papel crucial en la lucha histórica por la pervivencia de sus pueblos. Sin embargo, en este proceso han sufrido diversas formas de violencia por parte de los actores armados, dejando cicatrices emocionales, espirituales y fracturas en su relación con los territorios ancestrales.

El "Tejido Mujer" de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN) surgió en 1993 como un espacio para el encuentro y la reflexión, donde las mujeres indígenas de esta región han encontrado apoyo y han desarrollado estrategias para dar visibilidad a las violencias sufridas en el contexto del conflicto armado.

El 28 de mayo de 2020, este Tejido presentó el primer informe sobre la memoria de las mujeres indígenas del norte del Cauca a la CEV. Esta contribución buscó resaltar los impactos en la vida de las mujeres indígenas y en los territorios habitados por sus comunidades, enfatizando que la violencia infligida hacia ellas ha dejado marcas en sus cuerpos. A lo largo del documento se exponen casos de violencia sexual y se describe la sistematicidad con la que se perpetra. 

Conoce más

Recomendaciones 

01

Fortalecer los programas de atención psicosocial

Es indispensable fortalecer los programas de atención psicosocial para mujeres víctimas de delitos contra la libertad y la integridad sexual. Estas estrategias deben ser diseñadas con enfoque de género, interseccional, diferencial, étnico y territorial. 
02

Rehabilitación y reintegración social

Las entidades del Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a las Víctimas (SNARIV) deben seguir fortaleciendo los programas de rehabilitación y reintegración social que ayuden a las mujeres víctimas a recuperar su autonomía, confianza y habilidades para desenvolverse en la sociedad. Algunos asuntos prioritarios son la capacitación laboral, el acceso a oportunidades educativas, apoyo para encontrar empleo y medidas para prevenir la revictimización.
03

Capacitación y sensibilización de profesionales

Es esencial que los funcionarios y profesionales que asisten a las mujeres en la ruta de atención estén capacitados y sensibilizados respecto a los patrones de violencia contra las mujeres y las diferentes modalidades de violencia sexual durante el conflicto armado. Esto es fundamental para para brindar orientación y acompañamiento efectivo evitando revictimizaciones.
04

Mejor acceso a la justicia para mujeres afrodescendientes e indígenas 

es necesario fortalecer el acceso a la justicia y a los servicios de atención para mujeres afrodescendientes e indígenas mediante una mayor difusión de información sobre la presencia de instituciones que brindan estos servicios en sus territorios. Además, se deben promover garantías procesales en lenguas nativas, lenguaje de señas y mediante formas de comunicación apropiadas.

Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas
Dirección de Registro y Gestión de la Información